Se trata de N.H. Beatriz Cobo Rossell, natural de Santillana del Mar (Cantabria), que a sus veintidos años de edad cuenta ya con una curtida vida cofrade. Miembro de la Hermandad Servita de Nuestra Señora de los Dolores, de la Hermandad de Nuestra Señora del Robledo Coronada, de la Hermandad trianera de la Divina Pastora de las Almas y de esta, nuestra grande y querida Hermandad. Aunque ella dice ser una hermana más, actualmente, ocupa el cargo de fiscal del Grupo Joven y nos deleitó con sus palabras en la VI Edición del Pregón Juvenil de la Semana Santa de Constantina, así como en ocasiones, acude a la llamada del vestidor de la Hermandad, para hacer sus pinitos en el cambio de atuendos de Nuestras Titulares.
Es por ello, por sus andaduras en su joven transcurrir por el mundo cofrade, pero no por ello menos intensas, por lo que decidimos plasmar aquí sus vivencias y sentimientos.
COMIENZOS2. ¿Quién te introdujo la curiosidad por nuestra hermandad? Mi sentimiento religioso viene de mi familia, sobre todo de mi madre, quien me enseñó desde bien pequeña el amor a Cristo y a su Madre. Desde que tenía 3 ó 4 años comencé a coleccionar muchas estampas de imágenes marianas (y lo sigo haciendo) que provocaron que comenzara a interesarme por ver las Vírgenes que representaba en el papel. Como es lógico, las imágenes más repetidas eran de la Virgen del Robledo y de la Amargura, lo que hizo que cada vez que iba a Constantina me perdiera por la Parroquia mirando esas Vírgenes que tan pocas veces podía contemplar y que a mí me encantaban.
Por otra parte, ha influido mucho en mi formación como “amargurista” (si se me permite la expresión) mi familia y los amigos de mis padres. Cada vez que salíamos juntos eran inevitables los temas relacionados sobre nuestra Hermandad. De esos amigos, la gran mayoría han sido miembros de Junta de Gobierno, como Andrés Manuel Marín, mi tío, Manolo Prieto, Manolo Fajardo, Enrique Martín, María Dolores Núñez, Javier Cano, etc.
3. ¿Cuál ha sido para ti el momento más importante de toda la historia de la Hermandad? Para mí, todos los días de mi Hermandad son importantes. El hecho de que siga viva cada día es algo para destacar y recordar. Desde 1947 hasta 2009 han pasado 62 años en la que cada persona que se ha implicado en ella ha intentado aportar lo mejor que ha tenido, poniendo todo de su parte para que a sus Titulares no les faltara de nada. Para que la fe en Dios siguiera viva en Constantina.
4. ¿Y de tu estancia en ella, que podrías destacar? De mi estancia en ella destacaría todo lo que me ha aportado y lo que me ha enseñado como persona. He aprendido a trabajar con un grupo de personas del que nada conocía y al que he cogido muchísimo cariño. Mis compañeros de la Juventud y los miembros de la Junta de Gobierno han sabido acogerme siempre con el calor que una persona de fuera necesita. Para mí la Hermandad siempre será lo primero. Esta Hermandad me ha dado demasiadas cosas a cambio de nada.
Estación de Penitencia.
5. ¿Cómo fue la experiencia vivida en tu primera Estación de Penitencia? Fue en 2007 cuando realicé mi primera Estación de Penitencia. Recuerdo que fue mi primer año de Carrera Universitaria y cogí más vacaciones de la cuenta para poder estar el Domingo de Ramos en Constantina. Me monté en el autobús y tras 14 horas de viaje allí estaba en Constantina a la espera de que llegara el Domingo. Mi tío y mi primo Andrés Manuel consiguieron un traje de Nazareno para que pudiera salir en la Cofradía. De no ser por ellos y por Gloria, quien accedió a prestarme su traje, no hubiera podido hacerla.
Tristemente recuerdo que llovió y que en la calle Mártires tuvo que volverse la Cofradía a la Parroquia. Una vez dentro, sonó el solo de la marcha Reina de Triana que hizo que me emocionara tremendamente.
6. ¿Se corresponde la Estación de Penitencia real a la que tú imaginabas? Me la había imaginado de tantas formas posibles que no llevaba una idea preconcebida. Dejé que Constantina me improvisara una tarde maravillosa y así fue. Aunque resulte exagerada, recuerdo cada paso que dí, cada lágrima que solté bajo el capirote.
7. ¿Qué papel tienes en la estación de penitencia? Mi papel es el de una nazarena más haciendo penitencia. El único papel protagonista en la Cofradía solo lo tienen dos personajes, que son el Santísimo Cristo de la Humildad y Paciencia y Nuestra Señora de la Amargura. El resto sólo somos participantes secundarios de lo que allí se vive.
8. ¿Qué te resulta más curioso o impactante de la estación de Penitencia? Quizá lo que más me haya impactado es lo que se vive en la calle Álamos en el Hospital de las Hermanas Mercedarias. Recuerdo este año con especial cariño, cuando me tocó quedarme parada un rato a la altura de la puerta del edificio donde estaban nuestros mayores esperando a la Virgen. Fue maravilloso ver la emoción contenida que se veía en sus ojos. Fue bellísimo contemplar como aquellos ancianos tenían mi misma ilusión, a pesar de la diferencia de edad. Me sentí uno de ellos. ¡Qué momento…! A pesar de los años que llevan a su espalda, guardan en su mirada la expectación por ver pasar a la Madre que sólo ven una vez al año.
9. Un momento en las salidas: Todos. Sin embargo, recuerdo el último rayo de sol que recibió la espalda del Cristo en Barrionuevo en 2007 antes de que comenzara a llover. Fue en ese momento cuando me creí donde estaba y lo que estaba haciendo. Hasta ese momento, no asimilé nada. La pena es que fue efímero. Fue una sensación muy hermosa, pues el Señor estaba recién restaurado y brillaban majestuosamente sus potencias con ese último rayo del sol de la tarde.
10. Marcha favorita: no tengo ninguna marcha favorita, sino que hay determinada marchas que me trasportan a momentos únicos que sólo viviré una vez. Por ejemplo, Amarguras, me recuerda a mi primer Domingo de Ramos en Constantina, mientras me vestía de nazareno en casa de mis tíos Andrés Manuel y Loli; Soledad Franciscana me lleva a mi Pregón el año pasado; o Caridad del Guadalquivir, que guarda el momento en el que vi al Esperanza de Triana por Reyes Católicos hace unos cuantos años, cuando fui a ver la Semana Santa de Sevilla por primera vez. O Campanilleros, mientras recuerdo como tiran una petalá a la Virgen de la esperanza en Calle el Peso. Podrían ser otras. Generalmente, tengo muy mala memoria musical, por lo que me quedo con las marchas que me evocan mis vivencias más intimas.
11. Estación de Penitencia inolvidable: no olvidaría jamás ninguna.
Grupo Joven
12. ¿Cómo ves desde dentro el Grupo Joven? Sinceramente, hoy veo un grupo unido y cohesionado con muchísimas ganas de trabajar, formado por personas muy válidas y con un único objetivo.
13. ¿Cómo consideras tu cargo? A mi cargo como fiscal no le doy mucha importancia desde un punto de vista funcional. Si que considero relevante ser miembro del grupo, por el hecho de poder participar activamente en todas las actividades que organizamos y vivirlas en primera persona.
14. ¿Hay algo que se debiese hacer y no se hace? Creo que existen algunos campos que aún no hemos tocado, y que quizá no lo hagamos, pero todo lo que nos hemos planteado, lo hemos cumplido.
15. ¿Te veías formando parte de un Grupo Joven? Pues siempre fue una ilusión. Cuando era pequeña veía que otros niños iban a reuniones y hacían muchas actividades en nombre de Hermandades, y siempre me llamaba la atención. Sin embargo, como vivo lejos, nunca me plantee la idea de formar parte del Grupo.
16. Algún consejo. No seré yo quien de consejos, quizá sea quien necesite de ellos.
17. Que te parece el blog desde el punto de vista de organizadora?. Es un mirador en el que contemplar toda la actividad no solo del Grupo Joven, sino de toda la Hermandad. Particularmente, me gusta contar todo lo que pasa para mostrar que nuestra Hermandad no se reduce al Domingo de Ramos ni al Sábado Santo, sino que es mucho más.
Pregón Juvenil.
18. ¿Cómo tomaste la decisión de dar el pregón? Confieso que me venía muy grande. Acepté tímidamente en septiembre de 2008 en la finca de Mari Carmen Arteaga, cuando Andrés Manuel me pidió que me hiciera cargo de dar el pregón en 2009. Escribir me apasiona pero la idea de ponerme delante de público hacía que me temblaran las piernas y era una dificultad que debía superar si quería salvar el pregón dignamente. Sin embargo, a pesar de todo ello, mi respuesta fue afirmativa.
19. ¿Cómo resultó ser el montaje del pregón? Comencé mi tarea en octubre viendo videos de pregones de diversos lugares de España. Confieso que nunca había tenido la oportunidad de asistir a ninguno y mi contacto con este mundo se reducía a lecturas que había realizado sobre alguno de Sevilla. Inicialmente, pensé que ello podía suponer una gran dificultad, sin embargo, hoy agradezco mi inexperiencia en ese campo porque no me deje llevar por ningún prejuicio ni ningún tópico – típico.
20. ¿Cómo viviste los días previos? Fueron una autentica locura. Toda la semana estuve pegada al pregón dando los últimos retoques, cambiando párrafos completos, renovando los versos, incluyendo matices, etc. Creo que la mayor parte del pregón se gestó en esos días, o mejor dicho, en esas noches. Volvía de la Facultad muy tarde, tenía que estudiar y después ponerme delante de los papeles para asegurarme de que todo seguía escrito. Quería que mi pregón reflejase lo que sentía en ese momento, y no lo que vivía en octubre o en febrero.
21. ¿Te resultó difícil la tarea? Ha sido la experiencia más costosa de todas las que he vivido. Desde octubre, no pensaba en otra cosa que no fuera el pregón. Eso hacía que me bloqueara delante del papel y que de la pluma no saliera nada productivo. Cambié varias veces de línea de desarrollo y de punto de vista. Hasta que después de navidad encontré lo que tanto había buscado, la inspiración. No obstante, lo más difícil fue pasar a soporte informático el pregón pues lo había escrito a mano, con mi papel y mi tinta azul. Para mí es muy especial sentir el contacto del folio para poder escribir con solvencia. Encontraba muy frío el ordenador, y además, no me fiaba mucho ya que podría perderme el documento. Con mis folios en la carpeta, tenia menos posibilidades de que desaparecieran.
22. ¿Qué sensación te llevaste al llegar a la capilla y afrontar la realidad que se avecinaba? Nunca había entrado en la Capilla donde recité el pregón. Me enfrentaba a una realidad desconocida. No sabía como estaban distribuidos los bancos, ni el fondo del local, ni donde se ubicaba el atril. Por suerte, la mañana del Viernes de Dolores pude acudir al Colegio para conocer más o menos el lugar y entablar la primera toma de contacto. En ese momento, me di cuenta de la responsabilidad que tenía y de que mi texto no iba a estar a la altura. Estuve toda la tarde en mi casa, apenas comí y me seguí los consejos que Alberto Cuevas me había dado a rajatabla. Cuando el reloj marcó las 18:30, me despedí de mi abuela y me fui sola al Colegio por las calles más solitarias. No quería ver a nadie para no echarme a llorar con el primer hola que me dirigieran. A la única persona que recuerdo de los instantes previos es a Antoñito y a Mariola.
23. ¿Cómo te sentiste mientras recitabas el pregón? Fue de una emoción inconmensurable. Cada palabra que decía la sentía como mía. Veía las caras del público y me entraban ganas de llorar al pensar lo que estaba haciendo y la de límites que estaba eliminando. Veía caras que habían marcado mi infancia y que siguen haciéndolo con el resto de mi vida. Esas caras de mi tía Mercedes, de mi familia y de los amigos de mis padres. Fue maravilloso ver que acudieran a apoyarme en esa tarde tan especial para mí. Sorprendida me quede con la asistencia de personas a las que apenas conocía pero que quisieron estar allí esa tarde. Ese fue un segundo pregón, el pregón de los rostros.
24. ¿Con qué te quedas de ese día? Me quedaría con los nervios y la incertidumbre inicial, esa que me propulsó a quitarme la chaqueta de la timidez y mirar a las personas que allí había, Y también guardaría la presencia de los amigos de mis padres, quienes me trataron como si fuera una más de su familia, supliendo, por ese momento, la ausencia de mis padres y mi hermana.
25. ¿Echaste algo en falta en ese día? Algo, no. Eché en falta a mis padre y a mi hermana, que por motivos labores ellos y por cuestiones académicas la otra, no pudieron venir a verme. Por eso, la última poesía del pregón se la dediqué a ellos. No encontré otra forma mejor de recordarles.
26. Anécdota del pregón: quizá una anécdota divertida fue la que ocurrió con el equipo de música y el himno de España. El disco se rayó y la música no avanzaba. Menos mal que ocurrió cuando había terminado el pregón.
Hermandad.
27. ¿Hay algo que no te gusta de tu Hermandad? De mi Hermandad me gusta todo. Desde lo más insignificante hasta la devoción que se respira por nuestros Titulares.
28. ¿Esta viva tu Hermandad durante todo el año? Gracias a Dios, podemos presumir de una Hermandad activa durante todo el año, que no cesa de hacer actividades en honor a nuestros Titulares, como los cuatro cultos anuales, la preparación de la Cuaresma y la Semana Santa, la colaboración con el resto de las Hermandades de Constantina, e incluso, de fuera de la localidad. Realmente, no hay mes en el que la Hermandad esté paralizada.
29. ¿Ves al pueblo volcado con las hermandades? A priori, podría decir que sí. Sin embargo, percibo que muchas personas sólo se acerca a las hermandades cuando es Semana Santa y el resto del año apenas acuden a las Capillas. Sin embargo, es una cuestión de cada sobre la que no prejuzgo. Simplemente, observo los hechos.
30. ¿Qué mensaje daría a los hermanos? Les diría que siguieran trabajando por la Hermandad y honrando así a todos nuestros Titulares.
32. ¿Qué debe representar una hermandad? Para mí son dos los vínculos que me unen a Dios. La familia y la hermandad. Por medio de una Hermandad la persona puede desarrollarse como cristiana y profundizar la fe de una forma más intensa. La unión entre los hermanos nos enseña a compartir, a trabajar entre todos por un mismo motivo, a sufrir las penas de los demás, etc. Ocurre lo mismo que en una familia, con sus penas y alegrías. La hermandad es una familia a lo grande, a la que tampoco eliges, sino que ella te elige a ti.
33. ¿Está suficientemente abierta al exterior la Hermandad? Considero que sí. Todo el que lo desee puede integrar nuestra Hermandad y compartir con el resto de hermanos la devoción a todos nuestros Titulares. No creo que el acceso a la Hermandad esté vedado a nadie. Lo único que hay que tener son ganas de participar y de dejarse llevar por la fe.
34. Consejo a la Junta de Gobierno. No soy partidaria de dar consejos. Simplemente les animo a trabajar de la mejor forma posible y a cuidar de todo lo que una Hermandad posee, no sólo, en bienes materiales. Y este consejo, nos lo deberíamos aplicar todos.
35. Cambios en la Hermandad en los últimos años: mis pocos años me impiden reflexionar sobre los cambios que se hayan podido producido. Una Hermandad, al igual que el resto de instituciones, está inserta de forma activa en nuestra sociedad, por lo que cambiará de acuerdo con ésta. Pero no te podría decir algún cambio en concreto.
Test General
36. ¿Que te parecen las composiciones musicales actuales y nuestras marchas propias? Respecto a este tema, no tengo mucha autoridad para responder, puesto que en cuestiones musicales no estoy muy “puesta”. Sin embargo, sí puedo decirte que mis marchas favoritas son clásicas, lentas, con acento fúnebre, que me transportan a la Pasión de Cristo y a la amargura y dolor de la Virgen. Considero que hay otro tipo de composiciones musicales que se interpretan en Semana Santa, que pudiendo ser bonitas, no se acomodan tanto a ese tiempo.
37. Originalidad de las vestimentas: ciertamente me parece una idea genial acompasar la apariencia de nuestras imágenes al tiempo litúrgico. Me parece una labor preciosa y nuestras hermanas Camareras junto a Carlos Rodríguez realizan un trabajo digno de alabanza. En agosto, tuve la oportunidad de estar con ellos en el cambio de vestimenta y pude ver el mimo con el que lo hacen todo.
38. ¿Perteneces a otras Hermandades? ¿A cuáles? Sí, a parte de mi hermandad de la Amargura, pertenezco a la Hermandad de Nuestra Señora del Robledo Coronada y a la Hermandad Servita de Nuestra Señora de los Dolores. Además, en septiembre juré las Reglas de la Real, Ilustre y Fervorosa Hermandad de la Divina Pastora de las Almas, Patrona del Deporte Nacional y Santa Ángela de la Cruz.
39. Humildad y Paciencia: son las cualidades que todos deberíamos cultivar para mejorar cada día un poco más. Además, el Cristo de la Humildad y Paciencia es el rostro de Dios.
40. Amargura: no tengo una o dos palabras, tengo demasiadas, pero se puede resumir en todo.
41. Soledad: su advocación sea la que mejor le convenga, pues en numerosas ocasiones, nos olvidamos de ella de forma inconsciente. Ella fue además, nuestra primera amargura, la de nuestros abuelos.
42. Yacente: el fin de todo, la muerte, y el broche de la Semana Santa de Constantina con Nuestra Señora de la Soledad.
43 .Santa Ángela: el ejemplo que todos los hermanos deberíamos seguir. Una mujer impresionante que vive hoy en el corazón del necesitado.
44. Domingo de Ramos: el comienzo de todo, y el reflejo de la devoción y trabajo de un año en un instante efímero.
45. Sábado Santo: es el fin de la amargura de María y el inicio de su Soledad. Me evoca mi infancia y mi primer contacto con la Hermandad.
46. 1947: es el inicio de un proyecto y las ilusiones de quienes apostaron por empezar lo que tiempo atrás tuvo su primera piedra.
47. 1997: cincuenta años de Hermandad se ven recompensados en una noche en la que cumplí un sueño.
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48. 2003: cuatrocientos cincuenta años de devoción soleana en Constantina.6. Mirada al futuro.
Confío en que nuestra Hermandad siga evolucionando al mismo ritmo que lo hace ahora, que siga cultivando la fe de todos sus miembros y de quien quiera acercarse. Estoy segura de que el amor a Cristo y a su bendita Madre no va a decaer y se seguirá reforzando en nuestra Hermandad. Todo ello se conseguirá con el apoyo de los que han luchado en tiempos pasados y la ilusión de los que cojan el timón de nuevas.
